Mucha actividad manufacturera permanecerá en los ME
Las políticas de Trump están diseñadas para que la actividad manufacturera regrese a Estados Unidos. No obstante, independientemente de los incentivos que se proporcionen a las empresas estadounidenses, no nos parece realista esperar la relocalización de numerosos tipos de operaciones de fabricación a bajo coste.
Es probable que la ropa, los juguetes e incluso los componentes electrónicos sean más económicos de producir fuera de Estados Unidos. Cabe señalar que la imposición de aranceles más altos no siempre cambia la aritmética competitiva. De hecho, los inversores pueden buscar empresas de ME en sectores que ahora se perciben como posibles víctimas de las políticas estadounidenses, pero que podrían salir indemnes. Además, países como India, Vietnam y México podrían beneficiarse de los aranceles de Trump, lo que ofrece nuevas oportunidades para los inversores en ME.
¿Habrá más estímulos en China?
No tenemos la respuesta a esa pregunta; las políticas chinas nunca son fáciles de predecir. No obstante, hay algunas cosas que sí sabemos. En primer lugar, China anunció en 2024 unos estímulos fiscales y monetarios enormes que ascendían a casi el 6% del PIB. En segundo lugar, hay antecedentes de fuertes repuntes del mercado bursátil chino a raíz de la aprobación de paquetes de estímulos en el país, y esas subidas también han elevado las rentabilidades de los ME en general.
De hecho, los estímulos fiscales desencadenaron subidas de las acciones chinas en el tercer trimestre de 2024, período en el que tuvieron un comportamiento superior a escala global. Las medidas fiscales y monetarias del año pasado siguen filtrándose en la economía y las empresas. No hay duda de que la economía china sigue aletargada, pero la aplicación de un nuevo paquete de estímulos en 2025 podría cambiar radicalmente la dinámica de las acciones del país y de los ME de forma más general.
Hay muchos otros países —y empresas— de ME más allá de China
Dada la importancia de China en la escena mundial, los inversores suelen vincular su suerte a la del resto de países y empresas de ME, pero creemos que esto es un error.
Los inversores en ME no pueden dejar de lado a China, ya que es la segunda mayor economía del mundo. Al cierre de 2024, su ponderación en el MSCI EM Index era del 26,2%. No obstante, las empresas que componen este índice son de países muy diversos. El él están representados desde India y Corea del Sur, países con fuertes ponderaciones, hasta componentes con cada vez más presencia, como Arabia Saudí, y otros con menores ponderaciones, como Brasil, Grecia y Polonia. Los inversores incluso pueden encontrar joyas ocultas en países no representados en el índice, como Kazajistán.
Las empresas ubicadas fuera de China pueden estar menos expuestas a los riesgos arancelarios en caso de que la guerra comercial entre Estados Unidos y el país asiático se recrudezca. Algunas oportunidades en empresas de ME, desde habilitadores de la inteligencia artificial hasta beneficiarios de la reforma de Corea del Sur, tienen menos probabilidades de sufrir las medidas de Estados Unidos. Además, ampliar el radio de búsqueda podría resultar en una cartera diversificada de acciones de ME que ayude a reducir los riesgos regionales de ciertas partes del mundo en desarrollo, especialmente conforme se extiendan los efectos de las políticas estadounidenses.
Los ME siguen siendo una fuerte importante de alfa
Sabemos que las rentabilidades de los ME pueden experimentar presiones en 2025. Sin embargo, la renta variable de estos mercados ha sido tradicionalmente una fuente excelente de alfa —o de rentabilidad superior a la del mercado— para inversores activos competentes (Gráfico).