Lograr equilibrio en renta variable EE. UU. ante nuevas amenazas macro

06 octubre 2023
5 min read

Un enfoque flexible puede ayudar a los inversores a lograr el equilibrio adecuado entre riesgos a corto plazo y oportunidades a largo plazo.

La elevada inflación, los altos tipos de interés y el temor a la recesión han sido una constante durante 2023. Sin embargo, si se observa el comportamiento del S&P 500 durante buena parte del año, estos factores parecen no haber influido en el mercado de renta variable estadounidense. Ahora bien, el mercado en general muestra un panorama distinto. Los inversores en renta variable pueden hacer frente a las incertidumbres adoptando un enfoque flexible que reconozca los riesgos reales y apueste por mantener posiciones en empresas con revisiones al alza de los beneficios y valoraciones atractivas. 

La incertidumbre macroeconómica parece estar en la mente de todos. En Estados Unidos, aunque ha inflación ha comenzado a caer, la Reserva Federal tiene dificultades para acabar con la subida de precios,  de manera que sigue apostando por el endurecimiento de la política monetaria y es probable que los tipos de interés se mantengan en niveles altos durante más tiempo de lo previsto. A su vez, el S&P ha ganado un 13,1% desde enero hasta el 30 de septiembre.

A pesar de la debilidad registrada en el tercer trimestre, con un retroceso del S&P 500 hasta territorio negativo (-3,3%), el mercado ha mostrado una resistencia sorprendente. No obstante, si profundizamos un poco más, los resultados han sido mixtos (Gráfico). Las acciones relacionadas con la tecnología y el consumo han liderado las ganancias, impulsadas por un pequeño grupo de empresas consideradas las grandes ganadoras de la inteligencia artificial (IA). Si se excluye la tecnología, las revisiones de beneficios han descendido un 2,2%, lo que significa debilidad en buena parte del resto del mercado. 

Las tendencias del mercado de renta variable EE. UU. han sido mixtas.
Las tendencias del mercado de renta variable EE. UU. han sido mixtas.

La rentabilidad histórica y los análisis actuales no garantizan los resultados futuros. 
Basado en las estimaciones de beneficios del consenso, calculado utilizando únicamente los componentes actuales del S&P 500, con ponderaciones constantes en lo que va de año. 
A 30 de septiembre de 2023
Fuente: Bloomberg, S&P y AllianceBernstein (AB)

Las subidas de tipos no han tenido el efecto habitual
 

Las acciones muestran un comportamiento atípico. Por lo general, unos tipos de interés más altos suelen añadir presión a las acciones de duración larga, que ofrecen flujos de caja en períodos futuros. Esto se debe a que unos tipos de interés más altos incrementan la tasa de descuento que se utiliza para calcular el valor actual de los flujos de caja futuros, lo que provoca una devaluación de dichos flujos de caja, con el consiguiente efecto en el precio de las acciones. Sin embargo, las acciones tecnológicas, que generalmente están consideradas como renta variable de duración más larga, se han disparado.

¿Por qué no se han cumplido las expectativas para el sector tecnológico? El entusiasmo por la IA generativa supone una fuente de optimismo muy tentadora, especialmente cuando los inversores buscan empresas con factores de crecimiento de negocio capaces de superar las posibles dificultades macroeconómicas. De hecho, las revisiones de beneficios de 2024 para las acciones tecnológicas han superado a las de todos los sectores económicos estadounidenses (Gráfico). No obstante, dado que las acciones tecnológicas han repuntado más que sus revisiones del BPA, las valoraciones del sector también se han disparado. De hecho, si eliminamos las acciones tecnológicas, la valoración del S&P 500 parece bastante razonable. 

Más allá de la tecnología, las valoraciones de las acciones estadounidenses parecen más razonables
Más allá de la tecnología, las valoraciones de las acciones estadounidenses parecen más razonables

La rentabilidad histórica y los análisis actuales no garantizan los resultados futuros. 
Basado en las estimaciones de beneficios del consenso, calculado utilizando únicamente los componentes actuales del S&P 500, con ponderaciones constantes en lo que va de año. 
A 30 de septiembre de 2023
Fuente: Bloomberg, S&P y AB

El mercado impulsado por la tecnología ha sido extremadamente estrecho. De hecho, las diez principales acciones contribuyen de manera desproporcionada a las ganancias del mercado en lo que va de año. Aunque la revolución de la IA creará algunos ganadores destacados —y algunas acciones tecnológicas de megacapitalización ofrecen un fuerte potencial de crecimiento—, creemos que aquellos inversores demasiado concentrados en el sector tecnológico como única temática tendrían muy poca perspectiva. 

Más allá de la tecnología, algunos sectores se han comportado con arreglo a lo previsto en un entorno de tipos de interés más altos, mientras que otros no. Tal y como se esperaba, las empresas de consumo básico y materias primas han tenido un peor comportamiento relativo. Sin embargo, los sectores más sensibles al ciclo, como el industrial y el financiero, de los que generalmente se espera un buen comportamiento en un entorno de tipos de interés elevados, han ofrecido peores rentabilidades relativas. Las acciones del sector sanitario, que generalmente se valoran por sus características defensivas, también se han situado a la zaga. 

Prepararse para un mercado estadounidense más amplio
 

Puede que estas condiciones pongan nerviosos a algunos inversores. Las carteras que no presentan ponderaciones excesivas en las diez principales acciones que han liderado las subidas en los últimos meses han ido a la zaga del mercado. No obstante, vemos posible una mayor amplitud en lo que a rentabilidades del mercado se refiere en los próximos meses. Creemos que las carteras de renta variable deberían posicionarse en consonancia y mirar hacia partes del mercado que presentan un potencial de rentabilidad sólido, pero infravalorado. 

Tal y como muestran los datos anteriores sobre revisiones de beneficios, el año pasado hubo empresas estadounidenses de un gran número de sectores que obtuvieron peores resultados. Sin embargo, no se ha materializado el peor escenario. Al igual que la economía estadounidense, los beneficios han resistido mejor de lo que se temía. Si la inflación sigue cayendo y se evita una fuerte contracción de la economía, creemos que esas condiciones deberían favorecer unos fundamentales y una evolución de los precios de las acciones más sólidos para una amplia variedad de empresas, más allá de las tecnológicas de gran capitalización.

Estrategia flexible para los riesgos a corto plazo 
 

En unas condiciones de mercado tan variables, creemos que una estrategia flexible en renta variable puede resultar muy ventajosa. Consideramos que un gasto en consumo robusto debería ayudar a garantizar una desaceleración económica moderada. Si la economía aguanta bien, creemos que los sectores de energía, finanzas e industria merecen una mayor atención. Dado que este año las acciones de esos sectores cíclicos han sufrido presiones bajistas tras su comportamiento superior en 2022, sus valoraciones ahora resultan relativamente atractivas. Dentro de estos sectores, los inversores pueden encontrar acciones con precios razonables de empresas que ofrecen unas perspectivas de crecimiento de los beneficios y un potencial de rentabilidad del capital sólidos.

A nuestro juicio, las acciones de empresas tecnológicas seleccionadas resultan ahora oportunas en las carteras de  renta variable. Incluso entre las acciones de megacapitalización, hay casos en que las valoraciones podrían estar justificadas teniendo en cuenta la perdurabilidad de los negocios, la calidad de los balances, la resistencia de los márgenes y el potencial de crecimiento a largo plazo. 

Para identificar sectores defensivos también creemos que se necesita flexibilidad. De momento, pensamos que las acciones de calidad en suministros públicos y consumo básico —sectores tradicionalmente defensivos— son menos atractivas, dado su perfil de crecimiento lento, aunque estable, en un contexto de tipos de interés más altos y resiliencia económica. En caso de deterioro de las condiciones económicas, cabría esperar un renovado interés en los valores defensivos de calidad. Por tanto, los inversores deberían preparase para virar hacia esas áreas en caso necesario. 

Cuando hablamos de inversión en renta variable, la flexibilidad puede ser una virtud. Hoy en día, con tantos riesgos a corto plazo, y la posibilidad de que aumente la volatilidad, los inversores deben tener los pies en la tierra, evitar verse influenciados por la exuberancia de algunos temas y centrarse rigurosamente en los fundamentales de las empresas a largo plazo. Cuando los mercados parecen complacientes ante las preocupaciones macroeconómicas, la clave para lograr el equilibrio adecuado entre riesgos a corto plazo y oportunidades a largo plazo está en posicionarse de cara a unos resultados del mercado más variados de lo normal. 

The views expressed herein do not constitute research, investment advice or trade recommendations and do not necessarily represent the views of all AB portfolio-management teams. Views are subject to revision over time.