De anomalía a oportunidad: alta rentabilidad con bonos a corto plazo
La reciente crisis bancaria en EE. UU. y Europa ha sacudido a los mercados de renta variable y bonos. Aunque tanto las autoridades estadounidenses como las europeas no han tardado en reaccionar para evitar daños al sistema financiero y aplacar la volatilidad del mercado, estos episodios ponen de relieve la importancia de la gestión del riesgo y el valor que aportan estrategias de inversión con resultados demostrados, capaces de mitigar el riesgo y generar rentabilidades interesantes.
Desde una perspectiva histórica, los bonos high yield de corta duración y con altas calificaciones han proporcionado rentabilidades sólidas con características defensivas. Ahora que las curvas de tipos están invertidas en Norteamérica, Europa y partes de Asia, los inversores ya no necesitan incrementar el riesgo de tipos de interés (duración) para obtener rentas adicionales.
Los bonos con vencimientos más cortos suponen menos riesgo
Los bonos high yield a corto plazo tienen intrínsecamente un menor riesgo que los bonos a largo plazo, ya que sus vencimientos más cortos los deja menos expuestos tanto al riesgo de impago como al riesgo de tipos de interés. Además, dado que estos bonos se negocian actualmente por debajo del valor nominal (Gráfico), sus precios probablemente subirán conforme se acercan al vencimiento, generando así plusvalías.