La inversión en renta fija sistemática despierta cada vez más interés, pero exige conocimientos y recursos especializados. ¿Su gestor dispone de ellos?
Los procesos sistemáticos en los mercados de renta fija tienen cada vez más aceptación entre los inversores. Con esta nueva estrategia, las decisiones de inversión se basan en un proceso multifactorial dinámico, que consiste en aplicar factores predictivos que se relacionen de forma demostrable con una mayor rentabilidad relativa.
Un proceso de decisiones cuantitativas y basadas en IA clasifica cada bono del mercado con arreglo a su alineación con dichos factores predictivos, tratando de generar una mayor rentabilidad relativa (alfa) mediante la selección de valores bottom-up. Esto contrasta con los enfoques tradicionales de inversión activa en renta fija, que generalmente dan prioridad a la exposición a duración y al mercado de crédito (beta), así como a los sesgos sectoriales.
Los atractivos: la inversión en renta fija sistemática representa una estrategia complementaria y diferente de la inversión tradicional en bonos de gestión activa. Ofrece la posibilidad de obtener rentabilidades activas constantes y atractivas y, según nuestro análisis, ha demostrado tanto una baja correlación con las estrategias tradicionales de renta fija de gestión activa como una menor volatilidad.
Los posibles obstáculos: la inversión en renta fija sistemática requiere conocimientos y recursos especializados difíciles de adquirir. A nuestro juicio, los principales factores del éxito de la inversión en renta fija sistemática son: unos datos fiables y abundantes, los conocimientos sobre gestión de factores, y las herramientas más avanzadas de análisis de liquidez y trading. Se puede tardar años en desarrollar todo esto.
En un ámbito tan especializado, la selección de un gestor perspicaz es clave. En nuestra opinión, hay siete preguntas que los inversores deberían formular a su futuro gestor de inversiones.
¿Su proceso gestiona factores de forma dinámica? ¿Cuántos factores utiliza?
Dado que la elección de factores predictivos determina la rentabilidad de la inversión sistemática, y teniendo en cuenta que la eficacia de los factores fluctúa con el tiempo, los gestores de inversiones deben demostrar su capacidad para gestionar factores.
Hemos observado que las estrategias sistemáticas que utilizan una amplia variedad de factores ponderados de forma dinámica son capaces de generar mejores resultados que aquellas que recurren menos factores y aplican ponderaciones estáticas a dichos factores.
¿Ha integrado el análisis de liquidez en su proceso de inversión?
Los gestores sistemáticos capaces de ejecutar operaciones con bonos prósperas y rápidas disponen de una clara ventaja.
En comparación con la negociación de renta variable, la renta fija es mucho más problemática, ya que resulta más manual, menos transparente y menos líquida. Eso es un problema, sobre todo para los gestores de renta variable que tratan de pasarse a la inversión en bonos.
Por tanto, es fundamental evaluar la liquidez desde el principio. Los enfoques sistemáticos avanzados incorporan información sobre liquidez para ayudar a obtener exactamente aquellos bonos que su modelo haya seleccionado para comprar. Unos enfoques demasiado básicos pueden enviar una lista de bonos que cumplan determinados criterios a la mesa de negociación de esos gestores, que comprarán aquellos que estén disponibles, incluso si no figuran entre las mejores opciones de su modelo. Además, si no hay suficientes bonos para comprar, la negociación podría retrasarse hasta que el proceso comience de nuevo.
¿Cómo de completos son sus datos?
Unos datos abundantes y depurados, rigurosamente recopilados y que cubran un largo período de tiempo constituyen la base toda inversión sistemática sólida. Cuidado con los gestores que tengan un corto historial de datos o compren conjuntos de datos de peor calidad.
¿Cómo integra la IA en su proceso?
Los gestores pueden añadir valor con técnicas de aprendizaje automático en muchos niveles del proceso sistemático. Las ventajas que aporta la IA van desde ahorro de tiempo y mejora de la eficiencia (identificar patrones de precios para introducir datos que falten de forma rápida y fiable), hasta avances cualitativos (análisis de mayor calidad de varios factores de valoración para ayudar a encontrar nuevas señales y hacer más eficaces las señales existentes). Los gestores que no aprovechen el poder de la IA quedarán rápidamente relegados.
¿Su enfoque de inversión es exclusivamente cuantitativo?
Creemos que integrar expertos en enfoques cuantitativos dentro de un equipo general de renta fija que cuente con profesionales de gestión activa de deuda basada en enfoques fundamentales, como, por ejemplo, gestores de carteras y traders, puede aportar ventajas enormes. La experiencia más amplia que aportaría este equipo puede mejorar la ejecución y, por tanto, reducir los costes de transacción, así como proporcionar una perspectiva más amplia, ideas prácticas y comprobaciones de validez para evaluar los factores y perfeccionar los modelos. El equipo también puede señalar los riesgos y oportunidades que podrían no haberse probado utilizando datos históricos (backtesting), como, por ejemplo, las ventajas de incorporar el mercado de emisiones nuevas en un proceso sistemático.
¿Su proceso es una especie de «caja negra»?
La renta fija sistemática es un enfoque activo que se basa en el descubrimiento, la selección y el seguimiento de factores predictivos y que requiere la participación humana. Aunque el modelo determina las ponderaciones de los factores y es fundamental para el backtesting de los datos, la intervención humana es esencial a la hora de probar los factores y decidir si conviene añadir nuevos y eliminar otros.
Su gestor no solo debería demostrar que conoce perfectamente los factores, sino también que es capaz de identificar factores nuevos, evaluar cómo se comportan y modificar la combinación de factores de la cartera a medida que cambien las condiciones.
¿Cómo describiría sus resultados?
Lo que los inversores deberían esperar de los enfoques sistemáticos sólidos es un menor riesgo de crédito que los productos de gestión activa tradicionales, ya que se centran más en la selección de valores y controlan de forma más rigurosa los riesgos sectoriales y de crédito. Por esas mismas razones, prevemos que los gestores sistemáticos sólidos también logren una mayor captura alcista y una menor captura bajista, con ratios de información elevados.
El análisis de un proceso de inversión muy diferente requiere un enfoque de evaluación adaptado. Sin embargo, a nuestro juicio, dedicar tiempo y recursos a entender el proceso de la renta fija sistemática bien puede valer el esfuerzo. Creemos que este enfoque puede ofrecer una oportunidad atractiva para los inversores en bonos, dado su potencial tanto de generar alfa constante como de aumentar la diversificación, al introducir diferentes fuentes de rentabilidad a las carteras tradicionales de renta fija de gestión activa.
Para más información, lea nuestro libro blanco «Systematic Fixed-Income Investing Comes of Age».